Sunday, April 25, 2010

BODA EN RINCON

La primera reacción de los familiares de la novia y el novio, cuando supimos de los planes de irse a casar en Rincón, Puerto Rico, fue "Y por qué en Rincón?"  Ellos viven Washington, DC., y el resto de nosotros vivimos en varias ciudades de los Estados Unidos, lejos de Puerto Rico.  Tuvimos que volar hasta San Juan y allí rentar un auto para llegar a Rincón, que está a sólo 93 millas de distancia, pero que toma más de tres horas de camino por los "tapones" de la carretera y la cantidad de luces que nos paran por los tantos pueblitos que hay que cruzar.  Cuando por fin llegamos a nuestro destino y pudimos examinar el lugar, todos estuvimos de acuerdo con la respuesta a la pregunta "¿por qué en Rincón?"  Y fue unanimemente ¿y por qué no?
Si Rincón no es el paraíso, de seguro que está  bien cerca de él. Estoy seguro que Adan y Eva nunca la pasaron mejor.  El Rincon Ocean Villa, la mansión donde nos hospedamos por tres noches, es un maravilloso lugar con todas las comodidades de un hotel de cinco estrellas.  El edificio, ejecutado en estilo colonial, experimentó un intenso remodelamiento en 2008 y es ahora un edificio impresionante. Las recámaras tienen paredes de diez pies de alto y son bien amplias, todas con patio o balcón privado; el piso y las paredes del baño son de mármol; la entrada principal tiene una escalinata que es la delicia de cualquier fotógrafo y el atrio en el centro del edificio, con su bella fuente, es el lugar perfecto para una boda romántica.  Hay una torre altísima, a la cual se llega mediante una escalera de caracol, desde donde se puede observar un panorama bellísimo de 360 grados, con el océano azul al Oeste y las verdes montañas al Este. Encima de todo esto, el lugar está mantenido por el equipo de personas más amigables que usted pueda encontrar.  La piscina de 65 pies, con su Jacuzzi, está situada entre la parte trasera del edificio y la playa.  ¿Y qué se puede decir de la playa, con sus arenas doradas, suaves olas y todo bajo la sombra de almendros y cocoteros?
El pueblito de Rincón está localizado en la parte más occidental de Puerto Rico.  Fue fundado en el año de 1771 por Don Luis Añasco.  Aunque solamente cuenta con 17,000 habitantres, es la tercera  comunidad de mayor riqueza de la isla, después de Carolina y San Juan.  La pequeña villa no se encontraba en el mapa hasta el año 1968, cuando fue la cede del Campeonato Mundial de Surfing, el cual se ejecutó en la Playa Dome, llamada así por una estación de energía nuclear en forma de cúpula.  Desde entonces, surfers de todo el mundo visitan a Rincón en busca de esa ola perfecta.  En 2007, otra competencia tomó lugar también en la misma playa situada al norte del pueblo y un atleta local ganó el primer lugar en la division de Maestros.  Apodada "la tubería del Caribe", en el invierno las olas llegan a alcanzar hasta 25 pies de altura, igualando las de la Costa Norte de Oahu.
Este puebito es conocido como "el mejor pueblo de playa de Puerto Rico" y también como "la ciudad de los bellos atardeceres", algo que pudimos comprobar plenamente.  Como casi todos los pueblos de Puerto Rico, es una ciudad muy limpia y las casas se mantienen bien pintadas.  Unas millas al Norte está el Faro de Punta Higüero, el cual fue construido en 1892, pero fue destrozado por un huracán en 1928.  Tres años más tarde fue reconstruido y está operando continuamente desde entonces.
La boda de Sal Velázquez y Julia Bright fue una ceremonia encantadora, oficiada por el Pastor Kirk Ballin, ministro de la iglesia a la que asistían Julia y su familia en Roanoke, Va.  Fueron testigos del dichoso evento 35 familiares y amigos. Algunos no pudieron contener sus lágrimas, incluyendo el novio.  Pero fue una ocasión maravillosa y todos nos sentimos honrados de atender esta inolvidable boda.  Después de la ceremonia, una cena suculenta fue servida alrededor de la piscina y más tarde todos bailamos al compás de un grupo local de salsa.
Le deseamos a Sal y Julia una felicidad eterna y rogamos al Señor porque los siga llenando de bendiciones...junto con todos sus futuros hijos.

¿Una boda en Rincón? ....¿Y POR QUÉ NO?

 

Saturday, April 10, 2010

SANTA FE, NUEVO MEXICO

El estado de Nuevo México está localizado en la región suroeste de Estados Unidos.  Ha sido habitado por Indios Americanos por muchos siglos.  Tiene el porcentaje más alto de Hispanos (45%) y es también el estado tercero con el mayor número de Indios Americanos.
La capital de Nuevo México es Santa Fe, la cual fue establecida al pie de las Montañas Sangre de Cristo alrededor del año 1608.  La ciudad más grande es Albuquerque.  Uno de los ríos mayores es Río Grande, el cual desemboca en el Golfo de México, cerca de South Padre Island.
Durante la Segunda Guerra Mundial, las primeras bombas atómicas fueron diseñadas y fabricadas en Los Alamos, cerca de Santa Fe.  La población creció enormemente después de la guerra, subiendo de alrededor de 530,000 en 1940 a casi dos millones de habitantes en la actualidad.  Las áreas de empleo principales son electrónica, centros de llamadas y casinos Indios.  También es un gran productor de petróleo y gas natural.
Mi buen amigo y hermano Masónico Tom Ball me invitó a visitar Santa Fe y yo acepté con gusto.  Santa Fe es un pueblo único y hay varios factores determinantes que confirman esta realidad. Primeramente, la arquitectura es differente.  Las casas originales estaban hechas de adobe, un material compuesto de arcilla y paja de color beige, con esquinas redondeadas y piezas contrafuertes en sus bases.  Hoy en día, la mayoría de los edificios en Santa Fe están fabricados de concreto, pero el exterior guarda esa apariencia de adobe, y están pintados del mismo color.  Segundo, no hay edificios elevados y las calles son usualmente estrechas y curveadas, luciéndola muy pintoresca.  Y por último, el arte es increiblemente asombroso, contando con más de doscientas galerías.
Al llegar, estacionamos el auto en una plazoleta donde casi todos los edificios son galerías de arte.  La primera que visitamos tenía fuera de la entrada una escultura de bronze de tamaño natural de una India con su capa azul, la cual parece darle la bienvenida a los turistas.  El delicado diseño de sus mocasines, el detalle de las arrugas de la capa y todo el trabajo minucioso de la escultura en general, realmente es difícil de explicar.  Después de ésta, mi primera impresión del arte de Santa Fe, el paso apropiado fue encaminarnos a Canyon Road, una calle de varias cuadras con docenas de galerías a izquierda y derecha.  Yo creía que las primeras galerías eran lo mejor de Santa Fe, pero me aguardaba una agradable sorpresa.  Parecía que cada galería que visitábamos superaba a la anterior. Yo hubiera querido pasarme toda una semana observando las distintas galerías, pero el tiempo era limitado y teníamos que seguir.  Se necesita por lo menos un mes para poder apreciar la magnitud del arte excepcional de Santa Fe.
Yo he visitado cantidad de galerías de arte en el pasado, pero la calidad de estas  pinturas y esculturas supera inmensamente todas las anteriores.  Fue un verdadero banquete para la vista y una inspiración para hacerme crear mejores pinturas en el futuro.
El arte culinario de Santa Fe también es impresionante. En todos los restaurantes que visitamos la comida era estupenda, aunque un poquito elevada de precio. 
Uno de los lugares más conmovedores de Santa Fe es la Iglesia Loretto, que está cerrada para servicio religioso pero permanece abierta para los turistas.  El edificio de dos pisos encierra uno de los misterios más intrigantes jamás contados.  La historia relata que las monjas de la iglesia tenían mucha dificultad en subir por la escalera interior a la tarima del coro.  Empezaron a solicitar un carpintero, pero todo el que venía les informaba que no había suficiente espacio para fabricar unos escalones.  Una  afortunada mañana, un viejo carpintero se presentó y les explicó que él podría construír una escalera de caracol. Y así lo hizo.  Fabricó una escalera circular simétrica que desafía todas las leyes de ingeniería.  ¡La escalera no tiene una columna de soporte en el centro!  Realmente parece un verdadero milagro que esta alta estructura no se desplome.  La historia acaba con la desaparición del viejo carpintero, que nunca le cobró a las monjas por su maravilloso trabajo.
La Catedral de San Francis, la cual, contrario a la tradición española, no se encuentra frente a la plaza principal, fue comisionada en el año 1869, pero tomó más de 15 años para terminarse.  Está diseñada en el estilo Romántico Francés, aunque tiene unas inexplicables ventanas moras, lo cual la hace más atractiva.
El Palacio de los Gobernadores, construído en 1610, es una estructura de adobe y sí está al cruzar la plaza.  Ha servido como casa de gobierno de Nuevo México por varios siglos.  Es el edificio público de contínua ocupación más antiguo en los Estados Unidos. 
El edificio más alto de la ciudad es el Hotel La Fonda, el cual ocupa una cuadra completa y asemeja un pueblo Indio.
Después de un par de días en Santa Fe, decidimos hacer varias excursiones para conocer sus alrededores.  Primeramente fue al famoso pueblito indio de Taos (esto merece otro escrito) y después al desfiladero del Río Grande, el cual es cruzado por un puente a 650 pies de altura, haciéndolo el quinto más alto de los Estados Unidos.  La vista del río desde el mismo es espectacular.  El puente ha sido escenario de varias películas, entre ellas, Natural Born Killers, Twins y Wild Hogs.  También ha sido el sitio de varios suicidios.
De aquí partimos para el Moreno Valley, con su lago plácido y rodeado de montañas con las cimas cubiertas de nieve.  Palisades es una pared de roca altísima muy impresionante. Forma parte del Parque Estatal del Cañon del Río Cimarrón.
De vuelta en Santa Fe, visitamos lo que para mí fue la mejor de las galerías.  Algunas galerías tienen un patio con varias esculturas, pero ésta no tenía un patio, más bien parecía un parque, con un laguito lleno de peces, tortugas y patos y hasta un par de cascadas.  Y con más de 40 esculturas de todo tamaño y forma.  Y la galería por dentro era también fascinante.
No puede haber un viaje a Santa Fe sin comer en el Coyote Café.  El almuerzo fue delicioso, con porciones abundantes y precio razonable.  La cerveza oscura local era muy buena también.  Desde este restaurante, en un segundo piso, se puede ver el parque y en la esquina el otro restaurante famoso de Santa Fe, Pascual´s, con sus deleitables desayunos.
En total, fue un viaje fantástico.  La compañía no podía ser mejor, la comida fue extraordinaria, las vistas maravillosas y el hospedaje muy placentero.  Pero es el arte, definitivamente, el punto culminante de esta aventura de cuatro días.  Ahora comprendo por qué mi buen amigo Tom regresa a cada rato.